19/11/24

Mi Pascua

Mi Pascua huele a lirios
por manos entregados
a todo el que ha llegado
buscando Su Mirada.
Allí, entiende el delirio,
que en Él tiene su gente,
cuando sublimemente
su alma es atrapada.

Mi Pascua huele a rosas
que nacen sin espinas
y adornan las esquinas
de un palio sin igual,
en él su Gracia posa
la Dueña de las flores
que derramando amores
se deja contemplar.

Mi Pascua es candelero
con cera derramada.
Es cruces de miradas
y Mano que besar.
Mi Pascua es posadero
de amores y sentires,
final de esos abriles
que en el alma guardar.

18/11/24

Presbítero de noviembre

Cuando el sol de noviembre,
con su luz mortecina,
retalla las esquinas
en ocasos en calma,
la Amargura desciende
ofreciendo sus manos
a modo sevillano
en San Juan de la Palma.
 
Cuando el otoño aprieta
sus contraluces ocres
golpeando cual azotes
las espadañas blancas,
el sol por la Barqueta
se piensa el esconderse
sin ir de nuevo a verle
y rendirse a sus Plantas.
 
Cuando se va acabando
ese tiempo difunto
de recuerdos adjuntos
a negras vestiduras,
nos llega destellando
el alivio sereno
que en un perfil moreno
desprende su Amargura.
 
Cuando aún el recuerdo
de su embroque en convento
nos llega, en el encuentro,
para besar sus manos,
se nos escapa el verbo
posándose en su Cara
soñando la luz clara
de un Domingo de Ramos.

16/11/24

Chorizo de misa

Viene a rezar, por la jeta,
como si nada pasara,
paseando su mangada
entre todos sus veletas.
Ésa gente es la que inquieta
mi sentido de hermandad.
La que acude a saludar
a este chorizo gusano
que nos robó a dos manos.
Vergüenza ajena me dan.

14/11/24

A un mes de Ti

De nuevo junto a Ti, otro Adviento,
en medio de un Altar de flor y cera.
Expectante belleza trianera
que ofrece con su Mano sus adentros.

En redonda vocal irá el acento
de todo el que arrimándose a tu vera
te nombre, y en tu Cara vea la Espera
de la Divinidad que llevas dentro.

Mocita que entre inciensos y alhucemas
presume de embarazo y se engalana.
¡Ay! Torre de David de Gracia llena

que al frío de diciembre pone llama.
Hermosa panacea de las penas
que anuncia Buena Nueva por Triana.

Y tú, contando...

¿Tú qué cuentas, nazarenos?
Y yo, buscando el Domingo
el que me pega el respingo
cuando veo su andar sereno.
Cuando bajo de un sol pleno,
que lo ilumina de Ramos,
marcha en busca de su tramo
y pavonea en su cadencia,
pues sabe que su presencia,
pone la Gloria en mis manos.

¿Tú qué cuentas, nazarenos?
Y yo, buscando miradas
que se quedan atrapadas
en unos ojos ajenos.
Y se clavan como truenos
al alma que los contempla,
cuando ya el tiempo no cuenta,
pues se detiene convulso
y sólo se escucha el pulso
en "chicotá" fina y lenta.

¿Tú qué cuentas, nazarenos?
Y yo, buscando tabernas,
donde reposar las piernas
envuelto en ambiente ameno.
Para entre ropa de estreno
y primavera en vestidos,
compartir lo que he vivido
en esta piel de María
que se convierte en poesía
cuando el tiempo es detenido.

¿Tú qué cuentas, nazarenos?
Y yo, buscando el incienso
que en nube se posa lento
por delantera y costeros.
Mientras, la voz de un saetero,
como un dardo lo atraviesa,
con su perfume lo apresa
llenándolo de fragancia
junto al de la abundancia
de la flor que lo adereza.

¿Tú qué cuentas, nazarenos?
Y yo, paseando mañanas
de vísperas que derraman
ceras recién encendidas.
Y flor que espera escondida
el golpe de un llamador,
para llenar de esplendor
dinteles de bambalinas
que un sol de tarde ilumina
con su dorado calor.

¿Tú qué cuentas, nazarenos?
Pues apúntame en la lista
de los que gastamos vista
para esquivar el terreno…
Y a las sillas que unos memos
ponen por todos los "laos".
Y al montón de "espabilaos"
que sueñan con un palquillo,
para encargarle a un pardillo,
tu trabajito, ¡"pringao"!

2/11/24

Noviembre macareno

Noviembre siempre es presagio
de un diciembre que te espera
para plantarse a Tu vera
entre Sentencia y Rosario.
Noviembre en el calendario
de esta grey macarena,
aunque de luto, es sin pena,
porque ya cuenta las horas
para que bajes, Señora,
a derramar Gracia plena.

1/11/24

Besar noviembre

Ir a besar tu Mano
en el frescor de noviembre
es ofrecerse a que siembres,
tu belleza en mis retinas,
al quedarme en el rellano
de un presbiterio florido
con el corazón prendido
en tu Guapura Divina.
 
Encontrarse con tu Cara
en la reposada tarde
antes de que el sol se guarde,
dorado, en la Resolana,
es sacar el alma clara
por la mudéjar ojiva
en difícil despedida
que siempre sabe temprana.
 
Parar a verte en la tarde,
es olvidarse del mundo
y perderse en el profundo
nacarado de tu encanto.
Es dejar que el alma escalde
sus miserias en tu Gracia
al prenderse en tu fragancia,
Reina de Todos los Santos.

19/10/24

Aquella Cava

Recuerdo tu arboleda,
plantada en anarquía,
soltando melodías
de hojas con el viento,
y cómo la alhucema,
en las mañanas frías,
sin vacilar salía
de todos tus adentros.

Recuerdo la humareda,
de un tejar alfarero,
amenazando un cielo
con tiznes de azoteas,
y cómo una moneda,
cruzada de agujero,
era trueque dulcero
en puesto de madera.

Recuerdo tus corrales
cuajados de geranios,
y alegres vecindarios
con sus puertas abiertas,
y cómo los chavales,
jugaban a corsarios
mientras que algún canario
le cantaba a la siesta.

Recuerdo tus olores
de pucheros al fuego,
reposando en sosiego
sus humildes viandas,
y cómo aquellas flores
que provocaban celos,
con aires veraniegos
cuajaban tus barandas.

Recuerdo tus exilios,
de muebles en las puertas,
para dejar desierta
la tierra especulada,
y cómo aquel auxilio,
de promesas inciertas,
fue la muerte encubierta
de tu historia afamada.

26/9/24

Cruz y Voto

Altar de flor, incienso y luz blanca
se alza por septiembre cual cascada,
y en su punto más alto, coronada,
la Cruz siempre Triunfante se levanta.

La Cruz, es Titular, y también Santa.
La escoltan luz, bandera y espada.
Un Voto de una fe Inmaculada,
es jura renovada a Sus Plantas.

Será siempre domingo, por septiembre,
cuando la nueva fila, por crucero,
imite a ancestros, desde siempre.

Las Reglas ponen fin, a tal reguero,
que camina hacia ellas, de frente,
y se funden en beso y en un Credo.

22/9/24

Rosa de Oro

Rosa de Oro es tu Cara
cuando el Adviento en Sevilla
se pasea por Tus Mejillas
mientras tu Mano es besada.
Rosa de Oro es la clara
luz que el amanecer
cuando en Sales y Ferré
se enciende con tu llegada.
Fue, por siempre, tu mirada,
que da sentido a mi fe.

18/9/24

Frescor y ocre

Bonanza de un frescor entre calores
dibuja tu tapiz con sus pinceles.
Retrasa el reloj, amaneceres.
Cae al fin, el calor entre fulgores.

El azul va cobrando los colores
de una luz que ilumina tus vergeles.
Nueva luz, de otoñal atardeceres
que muestra en tu cielo sus candores.

Cielo azul, con su luz ocre y tendida
en suelo de hoja seca derramada.
El aire, da un calor de despedida.

El cielo va marcando la llegada
de un otoño, que trae en su venida,
la brisa que por mi es deseada.

11/9/24

Preguntas respondidas

¿Para qué quieres Tú el sol?
¿Para qué luz de la tarde?
Si eres Tú quien ilumina
a Sevilla en sus esquinas
inundándolas de Salves.

¿Para qué ponerte palio?
¿Para qué doce varales?
Si el mismo cielo se embroca
en noche que busca loca
tus perfiles celestiales.

¿Para qué flor en tu paso?
¿Para qué mano del hombre?
Si te sobra todo atrezo,
mi Rosa de San Lorenzo:
María del Dulce Nombre.

8/9/24

Natividad

Ya Sin Pecado nacía
pues era lo necesario
al ser el primer Sagrario
que reservaba al Mesías.
Hoy celebramos el día
llenos de fe y alabanzas.
Firmes, en la confianza,
de estar pisando este suelo
que Ella nos convierte en Cielo.
Ella se llama: Esperanza.

3/8/24

La penúltima... si Dios quiere.

Es el calor del verano
el mejor acompañante
para ponerle semblante
a la que es tarde soñada.
Puede parecer temprano,
pero no se escapa un día
sin soñar mi cofradía
agarrado a la almohada.

Después de haberme pasado,
más de cincuenta años,
andando por los peldaños
de sus formas y maneras;
después de ser criticado,
casi siempre incomprendido,
por quienes tengo en olvido,
de nuevo, vuelvo a Su Vera.

Frente a una mar plateada
rebobinando la mente
la noche lo grabó en mi frente
como un hechizo de estrellas.
Se acerca la retirada.
Ya acompañé a monaguillos.
Quiero que el próximo brillo,
de mi raso, sea con Ella.

Así que no pasa nada
por cambiarme de lugar
y que mi procesionar
acompañe Su camino.
Y de ocaso a madrugada
sentir unas bambalinas
mientras mi raso ilumina
a Triana por destino.

Me pillas ya en retirada.
Mas de raso, una vez más
el puente he de cruzar,
igual que lo comencé.
Con tres lustros, me estrenaba. 
Tras más de cincuenta rasos,
con Su Madre, irán mis pasos:
¡Como la primera vez!

1/8/24

Comienzo en Tus Manos

Presagian nardos sus manos
cuando agosto se despierta
y pone en fila, a su puerta,
un ocaso de verano.
Abanicos al solano
refrescan espera y rezo.
Vienen a dejar sus besos
prendidos bajo corales.
Ella ya espera brotares
de luz en el alba fresco.